El instrumento que recibió Cadmiel Morán tiene más de 100 años y era una herencia familiar de la mujer que decidió donarlo.

Durante la tarde del lunes 29 de enero, la Escuela de Música Papageno entregó un piano de más de 100 años como comodato a Cadmiel Morán (13 años), estudiante prodigio del profesor Richard Navarrete. El instrumento era una herencia familiar de una mujer que decidió donarlo para cambiarle la vida a un niño que lo necesitara.  

 

“Creo que es el mejor destino que puede tener. Ninguno de mis hijos se dedicó a la música. Tener estos pianos requiere espacio, pensé que cuando yo ya no este, el piano iba a terminar en cualquier parte. Quise asegurarle un futuro. Es una herencia familiar. Mi abuelo se lo regaló a mi madre y ella a mí, entonces es algo muy querido”, afirmó la donante.

 

Por su parte, Richard Navarrete comentó que “cuando yo supe que existía la posibilidad de entregar un piano a través de la fundación, inmediatamente pensé en Cadmiel. Es un pianista que tiene el talento, el tiempo y la determinación para seguir en esto toda su vida. Lleva dos años siendo mi alumno y ya está tocando repertorio avanzado”.

 

“Hace años Papageno llegó a enseñar instrumentos a mi escuela. Yo empecé en segundo básico con una melódica. Después mi papá me trajo un teclado que le prestaron en la escuela y ahí empezó todo. Tuvimos clases online con el tío Gabriel (profesor de la ruta Rukapillán) y le mostré el Canon de Pachelbel, era una de las únicas cosas que sabía. Me felicitó y me dijo que felicitara a mi profesor, yo le dije que no tenía profesor, que practicaba solo y él me dijo que haría todo lo posible por conseguirme una beca en la Escuela de Música Papageno en Villarrica”, explicó Cadmiel.

 

Gracias a la generosidad de la donadora, ahora Cadmiel puede seguir perfeccionando su técnica de piano en su tiempo libre y también acompañar las tardes de sus padres, con melodías y alegría.